Las aftas o pequeñas llagas en la boca, también denominadas ‘estomatitis aftosa’, son un trastorno que puede llegar a ser bastante doloroso y que suele ser frecuente en las mujeres. Esto es debido a que están muy ligadas al estrés, a los cambios hormonales y un sistema inmune deprimido.
Estas pequeñas úlceras suelen localizarse en la mucosa de la boca, y los lugares en los tienen mayor tendencia a aparecer son los labios, la lengua y las mejillas. Su apariencia las muestra como pequeñas heridas redondeadas e inflamadas con los bordes planos y que suelen ser recurrentes.
Las causas de las llagas en la boca
Aunque sus causas no son conocidas, es mucho más frecuente su aparición en mujeres que tienen entre 10 y 19 años y suelen relacionarse con los cambios hormonales que se producen durante esta etapa.
También el estrés, el nerviosismo o la ansiedad, pueden llevarnos a sufrir un brote de estas aftas bucales. Además, pueden tratarse de una sintomatología secundaria debido a una enfermedad sistémica o autoinmune o de algunos tipos de cáncer, como el linfoma o la leucemia.
La ingesta de algunos medicamentos y de algunos alimentos como el chocolate o el café, también se han visto como detonante de la aparición de aftas bucales.
Cómo tratar las aftas bucales
Generalmente, las personas que tienen tendencia a sufrir brotes de llagas en la boca, estarán predispuestos a padecerlas durante toda su vida. Para ellas, se suelen recetar productos con ácido hialurónico o enjuagues de clorhexidrina, ambos ayudan a combatir el dolor.
Las primeras 48 horas tras la aparición del afta, suele tener una intensidad aguda, que con el paso de los días tenderá a desaparecer. Es habitual que estas llagas en la boca aparezcan dos o tres veces al año, y su incidencia se incrementa en los meses de primavera y otoño.
Su prevención es prácticamente imposible, aunque ya se sabe que las etapas de mayor estrés y nerviosismo suelen acrecentar sus apariciones. Además, algunos psicofármacos para combatir la ansiedad suelen provocar una disminución de la salivación, lo que provoca que boca se encuentre en un estado más propicio para desarrollar las aftas.
¿Sufres de llagas en la boca? ¿Cómo sueles combatirlas?
