Cada dos por tres, hacen aparición nuevas dietas de adelgazamiento que prometen una rápida pérdida de peso sin invertir apenas esfuerzo. Esto suele acabar en una serie de desventajas para la salud, como el desequilibrio de nutrientes, la pérdida de masa muscular y un aumento del riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y diabetes.
Este tipo de dietas suelen estar prescritas por personas que no pertenecen al campo de la nutrición y suelen caracterizarse por la baja cantidad de calorías que se consumen.
Los peores efectos
La situación de semiayuno que suelen promover este tipo de dietas, provoca la activación del cuerpo para compensar la falta de energía. De esta manera, se acelera la destrucción de las proteínas corporales, lo que acaba por provocar la pérdida de masa corporal traduciéndose en unas primeras semanas de éxito en el régimen al subirse a la báscula. Si a la dieta la acompañan de diuréticos, la pérdida será aún mucho más significativa.
Lo más negativo de todo esto es la rápida recuperación del peso perdido cuando se retoma una dieta más nomal: el llamado ‘efecto rebote’. Los fenómenos ‘yo-yo’ son muy frecuentes debido a que durante el estado de semiayuno, se ponen en marcha potentes mecanismos neuroendocrinos que se oponen a la pérdida de peso.
Las dietas más restrictivas pueden acabar por afectarnos negativamente a la salud de las siguientes maneras:
- Provocando desnutriciones proteicas y carencias de minerales y vitaminas.
- Produciendo efectos psicológicos bastante negativos.
- Desencadenando trastornos alimentarios, como la bulimia o la anorexia.
- Agravando el riesgo metabólico de las personas.
- Favoreciendo el efecto rebote.
Las dietas milagro más conocidas
Dentro de las dietas ricas en proteínas tenemos:
– La dieta del astronauta.
– La dieta Dukan.
– La dieta Mayo.
– La dieta de Scardale.
En las dietas ricas en hidratos de carbono encontramos:
– La dieta Prittikin.
– La dieta del Plan F.
Y en las dietas disociadas, las más conocidas son:
– La dieta de Montignac.
– La dieta Hollywood.
Si en lugar de sumarte a esta peligrosa moda de las dietas milagro, este verano te decantas por seguir unas pautas saludables, clica en este post en el que te contamos los trucos para no pasarnos de peso en vacaciones.
¿Sigues algún tipo de dieta? ¿Acudes a un nutricionista con regularidad?
